Anton Chéjov - Primeros relatos

El Naufragio del Brenda Lee

19:30 Hora local Base Guarda Costas en Puerto Rico .Las palmeras se agitan enloquecidas como paja al viento, el cielo oscuro deja caer torrentes de agua que todo lo invade, mojan, empapan; ese lluvia fuerte y gruesa que penetra en los rincones más reparados. Rugido de mil leones, relámpagos rompen la oscuridad; enormes marejadas se abaten, con furia devastadora, contra las defensas del puerto. Jennifer la tormenta golpea con toda su fuerza.

Un Jeep luchando valientemente contra la tempestad se detiene frente al comando. El Capitán, Sandoval, se baja del vehículo y entra corriendo, llevando con él la furia del vendaval.

_Descansen _ ¿Comandante un trago para recalentar el cuerpo? _Gracias, prefiero un café lo más fuerte posible. Maestre ¿Están todos presentes los oficiales de guardia? _ ¡Sí señor! _Caballeros, como pueden aprecian tenemos un huracán del Tipo 4 (*) en este momento se encuentra en medio del Caribe con rumbo a Florida, lo que estamos sintiendo es sólo su avanzada. Hemos recibido la llamada de emergencia de un velero, que navega  en medio del huracán tratando  de alcanzar la costa, se encuentra aproximadamente a 35 millas al Este de nuestra base nombre del bote ” Brenda Lee”. Cuatro tripulantes, dos hombres y sus respectivas esposas. Están luchando como pueden y no saben cuánto pueden resistir embarcan agua con cada ola. Nuestro helicóptero no pudo acercarse lo suficiente, el viento es demasiado fuerte y las olas muy altas…La única esperanza es llegar por mar.

_Sandoval se quedó mirando, con esa mirada dura que sólo los años de peligros y luchas contra los elementos, pueden lograr en un hombre. Un silencio sepulcral siguió a las palabras del comandante. El segundo oficial, tragando saliva y dando una larga aspirada a su inseparable pipa, rompió el silencio: _ Con este tiempo, ¿cuántas probabilidades tenemos de llegar al Brenda y regresar? _Pocas, pero más de las que tiene el Brenda de sobrevivir si no vamos; tengan presente que con este mar y viento no puedo exigirles que zarpen, mi deber es, pedirles que se preparen a salir en cuanto mejore el tiempo. _Comandante no encontraríamos nadie con vida. _Es probable, la única forma de ir es como voluntarios, no puedo obligarlos a salir. Yo iré, si alguien me acompaña, es su decisión.

El segundo, siempre con su pipa en la boca, miró fuera de la ventana, a lo lejos, mientras con la mano alisaba su barba, pensando, se levantó de su asiento y dijo: _Lo sigo comandante, nadie me va a privar de esta fiesta. Uno a uno todos los hombres se unieron como voluntarios para la misión. _Sabía que podía contar con Uds. ¡Neptuno va a tener que usar sus mejores armas para vencernos! En 10 minutos salimos ¡muevan ese culo, rápidos!

19:35 Horas, el Brenda Lee, en un lugar del mar Caribe 15 millas al sureste de Key West

_ ¡Fred! Trata de bajar el foque, no va a resistir la fuerza de este viento, va a explotar _ ¡Trato de bajarlo pero está trabado! _ ¡Córtalo! No puedo mantener el barco! _Listo ya lo hice.

_Vete bajo cubierta con las mujeres y cierra todo. _ ¿Y tú? _Me quedo gobernando mientras pueda, luego bajo también y que Dios nos proteja. _ ¡Ojo! Ola gigante por proa ¡Sosténganse como puedan! Una gigantesca ola rompió en cubierta, con toda su furia. La masa de espuma y agua, levanto a Fred lo arrastro y golpeo brutalmente; sólo la desesperación logró salvarlo, se aferró al mástil con las últimas fuerzas del animal herido que lucha por su vida. Ríos de agua y espuma inundaron los camarotes. Brenda clavó su proa bajo el embate del mar, pasaron segundos tan largos como siglos, una eternidad y poco a poco elevó  de nuevo su proa al cielo. _Si hay un Dios protector de los marinos, éste es el momento para ayudarnos. El barco no puede resistir otra como ésta. _ ¿El Rescate debería estar en camino? _Si no mejora el tiempo, los helicópteros no pueden volar, no creo logren enviar una unidad de rescate, debemos defendernos por lo menos hasta el amanecer…no le digas a las mujeres.

Desde los camarotes salió una llamada angustiada _ ¡Agua, agua bajo cubierta estamos inundados! _ ¡Fred! Baja y ayuda con la bomba manual, deben mantener el nivel a cualquier costo si nos inundamos no podremos resistir. _ ¿Puedes quedar solo en cubierta? _Sí, tengo que evitar que el barco se atraviese al mar, ya largué un ancla flotante  para mantener la proa al viento.

20:00 Horas, lancha SAR GC24, En navegación hacia el Brenda Lee. Un mar fuerza 5 sacude  el casco de la embarcación de rescate, olas de espuma blanca se abren al golpear la proa, ráfagas de viento zarandean la cubierta, la visibilidad es casi nula por la intensidad de la lluvia que se mezcla con las montañas de agua formando nubes negras. El Rescate GC24 se estremece con cada envestida del mar, la proa se hunde, levantando espuma, y reaparece orgullosa para enfrentar el próximo golpe de mar. _ ¡Concéntrate en la ruta timonel! No dejes que el mar te venza _(gritando para vencer el aullido del viento) Lo intento capitán, no es fácil, las ondas llegan por todas partes. _Sé que lo vas a lograr, adelante, no dejes que Neptuno nos gane la partida, esa gente cuenta con nosotros. _ ¡Capitán! El barómetro continúa bajando y el viento comienza a rolar _Me di cuenta eso significa que el huracán se acerca cada vez más y que aumentará su furia… ¡Atención! Miren esa es enorme…La monumental masa se abatió con fuerza sobre la cubierta tratando de clavar el barco en el abismo, el GC24 escoró peligrosamente, todo los objetos que no estaban bien fijados volaron  por los aires. Las hélices gravitaron con ruido ensordecedor golpeando el aire, el acero del casco gimió de dolor, el bote quedó unos instantes paralizado, sin gobierno, el silencio se hizo cada vez más pesado…poco a poco el Rescate comienzo a enderezarse. _Esta la pasamos, vamos, sigamos intentando. Segundo deme la posición ¿a qué distancia estamos del Brenda y una estima lo más precisa posible de cuánto demoraremos en llegar al sitio? Me está pidiendo un milagro, calcular una estima en estas condiciones._ ¡Si necesitas un milagro hazlo y rápido! Estás en este barco para hacer los milagros que te pido _ ¡Si señor! Dos minutos y tendré el milagro.

22:30 Brenda Lee, en el núcleo del huracán: Vientos de  40 nudos y subiendo, visibilidad media milla, mar fuerza cinco, lluvia intensa. Los vientos rugientes rolaban con fuerza endemoniada, lanzándose contra el velero. Neptuno estaba decidido en terminar la batalla: Relámpagos, saetas, lluvia, vientos, rugidos del mar, rompientes endemoniadas golpeando sin tregua el malogrado  Brenda.

_ ¿Cómo está la situación abajo? _Estamos sacando agua como podemos pero el nivel casi no desciende. _Continúen, no desmayen, cierren el paso bajo cubierta, evitará el ingreso de agua. _Si atranco tú no vas a poder entrar. _No te preocupes yo estoy bien, mi arnés de seguridad me mantiene amarrado al timón, sólo preocúpate de sacar el agua y que las mujeres estén lo mejor posible. _ Otro rompiente más grande que los demás golpeo la cubierta, levantó el casco y lo dejó precipitar por el barranco. El Brenda Lee no resistió el embate y se acostó completamente sobre el agua, el mástil tocó la superficie del mar, dejando la quilla fuera del agua.  Bajo cubierta todo voló por los aires, Fred y las chicas vinieron derribados y golpeados contra los muebles; en la cubierta Luis luchaba con todas sus fuerzas para no ser arrancado del timón, casi no podía respirar, el agua lo sumergía, lo halaba, lo aplastaba con fuerza criminal, sus manos sangrantes no soltaban el timón, su única esperanza de vida. Poco a poco el velero se enderezaba de nuevo, otra vez el mástil se erigía hacia el cielo en abierto desafío. _ Fred, Fred_ Esto es una ruina, estamos golpeados y sangrantes, _Otra de estas y no creo que el bote resista, preparo la balsa salvavidas, y nos alistamos para abandonar el barco, suban cuando les avise. _Está bien, aquí abajo el agua sube y ya no podemos luchar contra ella, vengo a cubierta para ayudarte con la balsa. _Si ven, bota la balsa al agua y mantenla amarrada a sotavento. _Voy. _El viento está aumentando creo estamos en medio de un Huracán de los más fuertes, que Dios nos ayude. _ ¡Escuchaste Luis! No, no escuché nada, na sirena…otra vez repitió ahora…_Corre busca la pistola de bengalas, lanza una para marcar la posición _Fíjate  ves contestaron.

Una bengala se elevaba hacia el Oeste _Es el Rescate, nos están buscando, trae a las mujeres, prepárense para abandonar el barco, rápidos apúrense. Una potente voz de megáfono rompió el aullido del viento mientras luces de reflectores alumbran lo que queda del maltrecho bote. _¡Ay del Brenda! Si escuchan hagan una señal. _ Fred y Luis agitan los brazos y gritan al unísono. _No podemos acercarnos más, es peligroso, suban a su bote salvavidas y los recogeremos, lo más rápido posible, es difícil mantener la posición.

24:00 Horas, Lancha SAR GC 24 navegando hacia la base.

_Doc. ¿Revisaste a los náufragos? _Si Capitán Todos bien, algunas contusiones, heridas leves, algo de hipotermia, están recuperándose bien.

_Ok, Timonel, ¿cómo vamos? _Todavía difícil pero lo peor pasó lo vamos a lograr…

Fredo Nedi 16/05/2004

Última revisión 27/04/2017

Notas Explicativas:* Huracán tipo 4 – Los huracanes se miden por su fuerza y velocidad del viento en una escala que va desde el 1 hasta el 7 siendo este ya nivel de desastre. *Tormentín – Pequeña vela, muy fuerte, que se monta en la proa del barco, cuando hay mucho viento, en caso de tormentas. *Ancla flotante_ un cono de tela unido a un cabo, se suelta por popa y su función es obligar al bote a mantener su proa hacia el mar SAR_ siglas inglesas “Search and Rescue” (Búsqueda y Salvamento)